Comunicar para que lo nuclear también esté en manos del pueblo

Por Nicolás Solmesky, Jefe de la División Prensa y Dante Martin Jefe del Departamento Prensa y Comunicación de la CNEA

Los responsables del área de prensa de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA), Dante Martin y Nicolás Solmesky, se enfocan en los motivos que los llevaron a comprometerse en la tarea de comunicar las actividades nucleares del organismo.

Cuando U238 nos ofreció escribir en la sección “Comunicar lo nuclear”, aceptamos a cambio de canjear el cómo por el para qué. Creemos importante poder enfocarnos en los motivos que nos comprometen con la tarea de comunicar los desarrollos de la CNEA antes que en el propio trabajo que llevamos adelante a diario.

(…) cuando hablamos de la JUSTICIA SOCIAL no dijimos que había que llevar solamente un poco más de dinero a los hogares del pueblo argentino, hablamos también de nutrir más abundantemente el alma y la inteligencia de nuestro pueblo… por eso la justicia social, como nosotros la entendemos, no consiste solamente en dar a nuestro pueblo lo material, sino también en prepararlo intelectual y espiritualmente… cuando la cultura y la ciencia están al servicio del bien, manejados por hombres buenos y prudentes, recién podremos decir que la ciencia y la cultura son elementos positivos y eso no será posible ni realizable hasta que la ciencia y la cultura estén en manos del pueblo y solamente del pueblo…”. JUAN PERÓN.

Ubicación en el contexto nuclear mundial

Argentina es uno de los tres países del hemisferio Sur, del selecto grupo de treinta en el mundo, que opera centrales nucleares. Además, es uno de los diez que maneja por completo la tecnología del ciclo del combustible nuclear, y que está en condiciones de realizar todas sus actividades con recursos propios, con la capacidad de fabricar prácticamente todo lo requerido por el sector.

Por otro lado, gracias a la sólida base política y tecnológica con la que fue creado su organismo promotor, la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA), logró generar un importante y variado abanico de actividades derivadas directa e indirectamente de sus investigaciones, originando, además, decenas de instituciones, empresas públicas y privadas e institutos educativos.

Reseña histórica indispensable, pero breve

A pesar de todo este potencial y los logros alcanzados, o quizás justamente por ello, el sector sufrió una serie de crisis que estuvieron a punto de convertirse en terminales.

Violentamente desde 1976 la CNEA, que entonces representaba el 100% del sector, comenzó a ser desguazada. Los planes llevados adelante por el almirante Castro Madero, representante del golpe oligárquico militar en el organismo, allanaron el camino para implantar las políticas neoliberales (transferencias de bienes del Estado al sector privado, cierre de proyectos y áreas de investigación y persecución de sus trabajadores) que se agudizarían hasta el último fin del siglo.

Con la vuelta a la democracia, los sucesivos gobiernos lejos estuvieron de revalorizar el sector. Muy por el contrario, las políticas neoliberales profundizaron la parálisis de las actividades de la CNEA, que sufrió el desmantelamiento privatizador de la década del 90. Si se mantuvieron latentes sus capacidades y muchos de sus talleres y laboratorios fue por la resistencia de sus trabajadores, y llegó con lo justo a la reactivación que se planteó en 2003, con la decisión estratégica de terminar Atucha II.

La decisión de comunicar. Lo hecho hasta ahora

Un dato importante. Mientras la CNEA tiene 63 años de historia, su Gerencia de Comunicación apenas tiene 2 años de existencia.

Lejos de desconocer todo lo que hasta entonces se hizo en materia comunicacional, sólo intentamos remarcar con este dato que hasta entonces las acciones en tal sentido se realizaron sin una decisión política que acompañara, apoyara, que las sostuviera en el tiempo… o quizás, justamente, la idea haya sido esa: no comunicar.

Cuando no se comunica, la información no circula, las decisiones no deben justificarse, es menos complejo el engaño, la malversación y la persecución de los trabajadores.

Ya con el nuevo Plan Nuclear Argentino en marcha, lanzado en 2006 por Néstor Kirchner y Julio De Vido 1, asumimos en 2008 el desafío de construir un área jerarquizada de comunicación, considerando que una comunicación eficiente de la gestión pública es la forma más eficaz de defenderla.

Aunque para ello contamos desde el comienzo con el firme respaldo de Mauricio Bisauta y el de Norma Boero, para el organismo no fue fácil asimilar la creación de una nueva área, de una ciencia que, en general, muchos no terminan de entender y por ello ningunean. En este tema, como en otros tantos, se generó una crisis de crecimiento que aún se está sorteando.

No obstante, desde entonces se convocaron expertos internacionales en la materia; se reforzó el plantel con profesionales de experiencia en distintas disciplinas (comunicación, periodismo, diseño gráfico y audiovisual, relaciones públicas, sociología); se incorporaron los elementos y equipamientos técnicos necesarios para desarrollar el área; y, en julio de 2011, se creó la Gerencia de Comunicación Social de la CNEA.

Toda esta inversión dio sus frutos y se puede ver reflejada en la actualización permanente del sitio web, en la realización de audiovisuales institucionales, en la creación de una pequeña área pensada exclusivamente para trabajar con los docentes del nivel medio, para compartir contenido educativo. Por primera vez, se logró aprobar un manual de identidad visual, se participó en las dos ediciones de Tecnópolis y en ferias provinciales que brindaron la oportunidad para que cientos de miles de personas pudieran conocer directamente los beneficios y aplicaciones de la energía nuclear.

Se publicaron nuevos materiales gráficos y de diseño editorial, se creó un banco de imágenes y una biblioteca audiovisual, se desarrollaron herramientas de monitoreo diario y análisis de noticias vinculadas al organismo y al sector nuclear, se crearon boletines, newsletters y revistas de divulgación nuclear, se implementaron herramientas de comunicación 2.0 (facebook-twitter) para fortalecer la comunicación, tanto interna como externa, y se consiguió, entre tantas otras cosas, publicar centenares de notas en agencias y medios de comunicación.

¿Cuánto falta? Cada vez menos

Sin embargo, y a pesar de lo conseguido, sabemos que no alcanza solamente con lo hecho. Hay que pensar en hacer propuestas televisivas para llegar a millones de televidentes en Argentina y Latinoamérica.

Debemos encontrar, sumando al Ministerio de Educación de la Nación y a los de las provincias, la forma de incorporar la discusión sobre la tecnología nuclear como un tema de la currícula escolar de los niveles primario y secundario.

Habrá que plantearse seriamente la manera de crear una beca que acompañe a estudiantes secundarios de bajos recursos para que consigan ingresar a los institutos universitarios Balseiro, Sabato o Dan Beninson, logrando que las próximas generaciones de científicos provengan también de sectores populares.

Debemos unir esfuerzos para conseguir que el punto nuclear se sume con fuerza a la agenda común de los países latinoamericanos, apuntando a la creación de un organismo regional propio y autónomo, sumando a la ciencia y la tecnología como ejes de la integración regional.

Cristina Fernández de Kirchner pudo sintetizar en un concepto la idea que Perón desarrolla al inicio de este artículo: el empoderamiento. En su discurso del 25 de mayo de 2013, la Presidenta afirmó que “si no cuidan ustedes mismos lo que tienen, vendrán a quitárselos, como lo han hecho en toda nuestra historia. No podemos depender de una persona, debemos organizarnos para defender lo conseguido y para ello es necesario empoderar al pueblo, a la sociedad de estas reformas y estas conquistas para que nadie pueda arrebatarlas”.

Sabemos que aún estamos lejos del objetivo que nos planteamos al asumir este proyecto en la CNEA, pero esa es nuestra apuesta. Entendemos que si mantenemos este rumbo podremos ofrecer al pueblo las herramientas necesarias para poder decidir sobre esta tecnología.

Reconocemos que es pretencioso, pero ese es nuestro verdadero desafío.

 

1 www.cnea.gov.ar/pdfs/plan_nuclear_en_marcha/10%20Documentos.pdf

1 COMENTARIO

  1. Todo bien sobre lo que dicen, ¡¡¿¿ pero leyeron sobre castro madero??!! sin meternos en tema de política y que ya sabemos que una dictadura es lo peor que hay para un país, que el tipo fue una mierda de persona y que hubo secuestro de trabajadores que operaban en su órbita. pero el trabajo refuta lo que dicen ustedes. de hecho ayudo mucho a los soviéticos embargados a cambio de tecnología como para meterlo en el liberalismo.

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