El Instituto de Oncología Ángel Roffo posee un nuevo hibridizador

Al conmemorarse el Día Mundial de la Salud, la compañía GlaxoSmithKline donó un hibridizador al Instituto de Oncología «Ángel H. Roffo», uno de los principales centros de salud especializados en investigación y tratamiento del cáncer de la Argentina.

Este nuevo equipamiento permite alcanzar un diagnóstico temprano así como también arribar a un posterior tratamiento específico. Se trata de un soporte tecnológico que se utiliza en el laboratorio de patología molecular, que complementa las técnicas de hibridización in situ, para estudiar alteraciones cromosómicas en diferentes aéreas: tumores sólidos (sarcomas, carcinomas), leucemias y linfomas.

Un hibridizador permite establecer diagnósticos precisos que ayudarán a decidir el tratamiento más adecuado para cada paciente al aportar tempranamente información hacia la predicción de respuestas terapéuticas, ya que la técnica logra que el tejido a analizar alcance la temperatura óptima para la correcta visualización de los núcleos a través de una señal fluorescente.

Si bien el Instituto Roffo ya contaba con un hibridizador, el equipo que había en el hospital se descompuso hace unos meses y, debido a las complejidades técnicas del equipo, nadie lo pudo reparar.

Actualmente, en el Instituto Roffo se tratan más de 75.000 pacientes por año, los cuales son derivados desde todo el país. Gran parte de ellos son de bajos recursos, y no poseen obra social ni prepaga. Este nuevo hibridizador permitirá el acceso a todas las personas a los estudios moleculares.