El X Congreso Regional Latinoamericano, con sello IRPA

03-fotos-edicion-impresaPor Nadia Muryn. En U-238 #17 Mayo-Junio 2015.

Argentina recibió a colegas de distintas partes del mundo con motivo del X Congreso Regional Latinoamericano IRPA de Protección y Seguridad Radiológica que se llevó adelante en abril, y que reunió organismos y empresas nacionales y extranjeras para favorecer el intercambio de conocimiento y de experiencias en el progreso de la disciplina.

Luego de 24 años, La Federación de Radioprotección de América Latina y el Caribe (FRALC) le concedió nuevamente a nuestro país la oportunidad de ser anfitrión del Congreso Regional IRPA, que se llevó a cabo desde el domingo 12 al viernes 17 de abril en la Pontificia Universidad Católica (UCA), en la Ciudad de Buenos Aires. Como presidenta del Congreso, la Licenciada Ana María Bomben opinó acerca de lo que significó este desafío para la Argentina: «esto implicaba un honor, pero también una gran responsabilidad luego de nueve Congresos Regionales, debíamos trabajar mucho y bien para lograr un congreso exitoso y de alto nivel científico y profesional».

Con el lema «Nuevos Desafíos para un Mundo en Evolución», el Congreso Regional fue distinguido por la International Radiation Protección Association (IRPA) y se desarrolló en conjunto con el X Congreso Argentino de Protección Radiológica y el VI Congreso Iberoamericano de Sociedades de Protección Radiológica. «El haber sido distinguido este Congreso Regional como un Congreso IRPA, fue también un gran honor ya que la IRPA es la asociación reconocida mundialmente como la voz de los profesionales de la protección radiológica, está presente en 48 países y representa a 18 mil profesionales de todos los continentes», manifestó Bomben.

El Congreso tuvo una asistencia de 615 participantes procedentes de 26 países, y la convocatoria fue llevada adelante, principalmente, a través de todas las sociedades de Radioprotección de América Latina y el Caribe, junto con IRPA y la participación de las organizaciones y empresas internacionales que también cooperaron con la organización, tales como el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS), además de tener el apoyo de organismos patrocinadores nacionales como la Autoridad Regulatoria Nuclear (ARN), la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) y Nucleoeléctrica Argentina SA, quienes también estimularon a su personal a asistir y a participar activamente del evento.

Otras asociaciones como La Sociedad Argentina de Radiología (SAR), la Sociedad Argentina de Física Médica (SAFIM), la Asociación Argentina de Biología y Medicina Nuclear (ABYMN), la Asociación Argentina de Tecnología Nuclear (AATN) y la  Asociación de Profesionales de la Comisión Nacional de Energía Atómica y la Actividad Nuclear (APCNEAN), entre otras, también integraron este numeroso equipo participante, como auspiciantes del evento, además de promover entre sus asociados la participación y brindar su apoyo a la convocatoria.

Norberto Bruno, miembro del Comité Organizador y encargado de la supervisión general del Congreso se refirió al éxito en la concurrencia y la respuesta del público que asistió al evento: “La cantidad de gente inscripta superó ampliamente lo que pretendíamos. Otra característica que llama la atención es la cantidad de participantes extranjeros que hay. De alguna manera, eso demuestra la necesidad de este tipo de congresos, porque su importancia no sólo es a nivel nacional sino también regional, causa un efecto de importancia”. Del mismo modo, la presidenta del Congreso compartió su entusiasmo sobre el éxito en la convocatoria: «Esto fue realmente muy importante y extraordinario, ya que aunque era un Congreso Regional, profesionales de todo el mundo se dieron cita aquí y fueron bienvenidos para analizar el estado del arte, exponer sus trabajos y discutir los temas actuales y de interés en radioprotección».

La presencia de los jóvenes profesionales no pasó desapercibida durante el Congreso. «Lo destacable e interesante es la participación de la gente joven, y la institucionalización de ese premio otorgado especialmente a ellos. Porque acá, lo que importa es que, como nosotros en su momento, cuando empezamos, teníamos necesidad de aprender, de hacer las cosas cada vez mejor, y eso también hay que verlo y proyectarlo en los nuevos colegas”, señaló Norberto Bruno.

También la Licenciada Bomben destacó la concurrencia de público juvenil y, además, puntualizó acerca de la intervención activa que tuvieron los jóvenes dentro de la organización del encuentro: “Lo que deja un Congreso de esta envergadura es la participación de los jóvenes que tienen la oportunidad de contactar a los expertos, de formar redes de intercambio y de entusiasmarse con la protección radiológica. Para que esto se potencie, se eligieron Secretarios Técnicos para cada sesión temática o plenaria, que fueron escogidos entre los jóvenes profesionales de cada especialidad. A ellos se les dio la oportunidad de interrelacionarse con los expertos, junto con la responsabilidad de actuar en las sesiones: esta oportunidad única se demostró sumamente beneficiosa.»

En abril, la Universidad Católica Argentina (UCA) de Buenos Aires, recibió en sus instalaciones a profesionales de la ciencia y la tecnología de Latinoamérica y de distintas partes del mundo, con un programa científico que tuvo como fin aportar un completo panorama respecto de los últimos desarrollos en la ciencia y en la práctica de la protección radiológica. Allí se dictaron diversas charlas y conferencias en el Aula Magna y en el Salón Juan Pablo II, que posee dicha universidad, además del despliegue de una profunda y variada exhibición técnica.

Sobre las distintas temáticas tratadas en el encuentro, la presidenta del Congreso detalló: “Se llevaron a cabo sesiones plenarias con disertaciones de expertos nacionales e internacionales sobre Protección Radiológica en Medicina y en la Industria; Protección Radiológica del Público y el Ambiente; Cultura de Seguridad; Infraestructura Regulatoria; Emergencias Radiológicas y Nucleares; Educación y Entrenamiento en Protección Radiológica y Comunicación con la Sociedad en Protección Radiológica. También se llevaron a cabo sesiones temáticas sobre un amplio espectro de temas de interés, entre los que se pueden destacar protección radiológica en el trabajo, efectos biológicos de la radiación ionizante, gestión de residuos radiactivos, transporte y seguridad radiológica y protección física de fuentes radiactivas y una sesión especial sobre protección radiológica en radiaciones no ionizantes”.

A lo largo de la semana se dictaron cursos y talleres de actualización con el fin de renovar y sostener el conocimiento respecto de diversos temas relacionados con la protección radiológica. Los trabajos elegidos para la exposición oral provinieron de Argentina, Colombia, Brasil, Cuba, Perú, Uruguay, Paraguay, Ecuador, Venezuela, Bolivia, Costa Rica, Chile, México y España. Al mismo tiempo, se eligieron 394 trabajos para ser presentados en la exhibición de Posters a cargo del Comité de Programas y, como parte de la exhibición técnica también, diferentes organizaciones y entidades nacionales y extranjeras, como La Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA), INVAP, Nucleoeléctrica Argentina S.A, Autoridad Regulatoria Nuclear (ARN), el Foro Iberoamericano de Organismos Reguladores Radiológicos Nucleares (FORO), La Sociedad Argentina de Radiología (SAR), entre otras, todas ellas fueron distribuidas en un total de 20 stands con propuestas demostrativas y explicativas para el público.

Cada trabajo aceptado por el Comité de Programa del Congreso IRPA, tanto para ser presentados en formato oral como para poster durante la semana de exposición, ha sido publicado en el sitio web del Congreso (www.irpabuenosaires2015.org), junto con las grabaciones de las Sesiones Plenarias. Según explicó Bomben, dichas publicaciones “tienen como objetivo ser consultadas por los profesionales de todos los sectores y países, para que el Congreso pueda llegar a quienes, aún no habiendo participado personalmente del Congreso, puedan beneficiarse con él”.

Por otro lado, en la ceremonia de clausura se otorgaron distintos reconocimientos y menciones a la labor científica relacionada con la disciplina, entre las que se destacó la entrega del premio para Jóvenes Profesionales en Protección Radiológica en Latinoamérica y el Caribe, creado con el objetivo de contribuir y fomentar al interés de las nuevas generaciones en el ámbito de la protección radiológica. «En esta edición del premio, fueron galardonadas dos jóvenes profesionales argentinas, Cinthia Papp y Ayelén Giomi, pertenecientes a la CNEA, que recibieron respectivamente el primer y el tercer premio”, destacó Ana María Bomben.

A su vez, con el fin de reconocer la trayectoria y la trascendencia en el área de la regulación y la aplicación de radioisótopos y radiaciones ionizantes, también se concedió el Premio Celso C. Papadopulos, otorgado por la Sociedad Argentina de Radioprotección (SAR) al Ingeniero Abel González. Por otra parte, entregaron diplomas en reconocimiento a los mejores posters expuestos a lo largo de la semana.

La Argentina como sede

Argentina fue sede del Congreso Regional IRPA en 1991 y una vez más, 24 años más tarde, nuevamente le tocó al país llevar adelante esta tarea. En este sentido, Bomben expresó: “En el ámbito de la protección radiológica y en el de todos los amplios temas que ella abarca, la Argentina está posicionada en un nivel de alta jerarquía y de reconocimiento internacional. Sus profesionales forman parte de Comités de la Comisión Internacional de Protección Radiológica (ICRP) y del OIEA, entre otros».

Por su parte, Norberto Bruno manifestó: “Es importante que se haya dado en nuestro país. La Argentina ha sido siempre un referente en protección radiológica, no por una cuestión de superioridad, simplemente por una cuestión de desarrollo, es decir, porque la experiencia operativa que existe en el país es muy importante y eso puede verse reflejado en las opiniones de colegas extranjeros que se han capacitado en nuestro país».

La Licenciada Bomben también enfatizó sobre el rol de nuestro país en materia de radioprotección: «El nivel de excelencia de los profesionales argentinos en protección radiológica también se ve reflejado en el papel preponderante que tienen en el desarrollo de proyectos sobre diferentes temas como los que se realizan en el ámbito del Foro de Organismos Reguladores Radiológicos y Nucleares (FORO), proyectos que fueron presentados en sesiones del congreso y merecieron el reconocimiento de los expertos por lo innovador y la calidad científica y técnica del trabajo”.

Vivimos en un mundo atravesado por la radiación. La radioprotección contribuye al uso seguro de las prácticas beneficiosas que se relacionan con la exposición a la radiación ionizante. “La protección radiológica es un tema de gran importancia e incluye amplio espectro de incumbencia. Abarca desde la ciencia básica que estudia los efectos de las radiaciones hasta cómo llevar a cabo la protección radiológica de los trabajadores en los ámbitos de la práctica médica, industrial, actividad nuclear o de la investigación y docencia, y también la protección radiológica de los pacientes, del público y del ambiente”, aclaró Bomben.

Al mismo tiempo, la Licenciada describió cuáles son los fundamentos de la disciplina: “Los principios básicos de la protección radiológicas son: la justificación de las prácticas, es decir, evaluar si las actividades realizadas en una práctica con radiación o material radiactivo originan un beneficio neto positivo para la sociedad; la limitación de las dosis para trabajadores y público, y la optimización de las prácticas, el procedimiento para reducir tanto como sea razonablemente alcanzable las dosis de radiación. Basada en estos tres principios, se desarrolla la protección radiológica aplicada a todas las actividades relacionadas con radiaciones o material radiactivo para que se pueda obtener el máximo beneficio que la radiación puede aportar a nuestra salud y vida cotidiana”.

A modo de conclusión sobre lo que significa este tipo de encuentros e intercambios para la comunidad científica, Ana María Bomben, en tanto profesional abocada a la ciencia se expresó: “Este tipo de convocatorias, y en especial esta, con tan alta asistencia y de un excelente nivel profesional, sin dudas favorece el fortalecimiento de vínculos profesionales y mejora el conocimiento. Aun en estos tiempos que, con el avance de la tecnología y con la posibilidad que tienen los profesionales de estar interconectados en tiempo real y muy frecuentemente, el contacto directo y personal, la discusión cara a cara, el escuchar de primera mano y la posibilidad de preguntar al experto es algo irremplazable que hace que valga todo el esfuerzo y la dedicación que significa organizar un Congreso de estas características».

Asimismo aseveró que gracias al trabajo en equipo y al esfuerzo de todos los participantes, las expectativas puestas en el evento fueron las deseadas desde un primer momento: “Estoy profundamente agradecida a todas las organizaciones y asociaciones nacionales e internacionales y a todas las personas que contribuyeron de una u otra forma a llevar a cabo este Congreso, demostrando que cuando se juntan capacidades y voluntades se puede lograr un objetivo, por más ambicioso que sea. Lo que destaco especialmente es haber cumplido con el lema del Congreso ¨Radioprotección: Nuevos Desafíos para un Mundo en Evolución¨ y si hay una región en el mundo que está en permanente evolución, esa región es América Latina”.