El 18 de diciembre será la inauguración oficial de la Deep Space 3, la antena que permitirá conectar a la provincia de Mendoza con misiones científicas en el lejano cosmos. La misma fue instalada por la Agencia Espacial Europea (ESA) a 30 kilómetros al sur de Malargüe, luego de un arduo proceso de selección que incluyó otros veinte lugares de América, propuestos para el mismo fin.
La antena –que tiene 35 metros de diámetro y un costo de 50 millones de euros– será utilizada por la ESA para establecer comunicaciones con los satélites de las distintas misiones en el espacio lejano, controlar el estado de los mismos e incluso comandarlos.
A partir de diciembre, la Deep Space 3 se sumará a las otras dos antenas –una ubicada en Australia y la otra en España– que ya forman parte de la red de ESA. La inclusión de esta nueva estación permitirá un servicio de 24 horas a las misiones en vuelo e incorporará la misión Mars Express y Venus Express durante el año 2013. También asistirá a la Misión Gaia, luego de su lanzamiento a fines de 2013, que durante cinco años censará mil millones de estrellas de la Vía Láctea para determinar su posición, magnitud y desplazamiento.
Para poder instalar la gigante antena en Malargüe, la ESA firmó un convenio con su par local: la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE). La localidad fue elegida por sus características, energía eléctrica y la red de comunicaciones existente allí gracias al Observatorio Pierre Auger. A cambio, Argentina obtuvo el 10 % del uso de la antena que se empleará para investigación científica. Para eso, la CONAE firmó un acuerdo con el CONICET y la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA).
Debido a que la Deep Space 3 emite y recibe las mismas ondas que se utilizan para radio y televisión, los científicos argentinos la utilizarán como un radiotelescopio para estudiar objetos celestes y regiones que están a una temperatura baja, no visible y cuya energía no detecta el ojo ni los telescopios ópticos pero que pueden ser captados porque emiten ondas de radio. También se podrán estudiar moléculas en el espacio interestelar y eventos transitorios.
