Premio Nobel visitó centro atómico Bariloche

El premio Nobel de Medicina visitó el Centro Atómico Bariloche.

Edvard Moser visitó el Instituto Balseiro y el Centro Atómico Bariloche invitado por el grupo de neurociencias del Departamento de Física Médica del CAB. Moser es uno de los «descubridores del GPS” del cerebro, un sistema de neuronas que ayudan al posicionamiento y la orientación espacial y el lunes pasado brindó un coloquio en el Instituto Balseiro tras visitar el Centro Atómico Bariloche.

Moser realizó varias actividades, entre ellas, una visita al reactor escuela de investigación “RA-6” y a diversos grupos de investigación del Centro Atómico Bariloche y “se mostró interesado por el nivel y el régimen de estudio del Instituto Balseiro”, según informó desde un comunicado el Instituto Balseiro. , Las «conversaciones científicas fueron enormemente productivas y se abrió la posibilidad de que él y sus colaboradores realicen nuevos experimentos para verificar las predicciones de nuestras teorías” destacó Inés Samengo, una de las organizadoras del encuentro.

El público que asistió al coloquio del Instituto Balseiro colmó el Salón de Actos: “Para los que trabajamos en el área, el seminario nos resultó un excelente resumen de las ideas claves que hacen al sistema de navegación espacial en roedores, y por supuesto es estimulante escucharlo desde uno de sus principales actores” detalló en el comunicado Nicolás Vattuone, estudiante de Doctorado.

Edvard Ingjald Moser
En 2014 fue galardonado con el Premio Nobel de Fisiología o Medicina, compartido con John O’Keefe y su esposa May Britt, «por sus descubrimientos de células que constituyen el sistema de posicionamiento en el cerebro, que son las neuronas que arman mapas internos del espacio y que permiten a los animales orientarse y navegar por el mismo.

Moser nació en Noruega en 1962. Es Doctor en Neurofisiología por la Universidad de Oslo y en la actualidad es director del Kavli Institute para Sistemas de Neurociencia en Trondheim.

May- Britt y Edvar Mose

La directora de comunicación del instituto Balseiro, Laura García Oviedo, entrevistó al Premio Nobel
En el Instituto Balseiro, hay estudiantes de carreras de física e ingeniería. ¿Qué consejo le daría para sus carreras?
-Les diría que la física está comenzando a ocupar un lugar central en la neurociencia. De modo que simplemente alentaría a mucha gente con conocimientos de física a entrar en la neurociencia porque la neurociencia se está volviendo muy cuantitativa. Antes era más descriptiva, pero ahora hay muchos datos y puedes ver las relaciones y puedes crear modelos para cómo funciona. Entonces, me refiero a que te estás metiendo en la misma forma de trabajar que ha sido común en la física durante muchos años. Así que simplemente alentaría a mucha gente a entrar en la neurociencia porque esas personas son necesarias.

-Durante su charla, mencionó el trabajo de un barilochense, Emilio Kropff, que trabaja en el Instituto Leloir de Argentina y que realizó una estadía en el Instituto Kavli, como ahora está haciendo una de nuestras egresadas, Soledad Gonzalo Cogno. No puedo dejar de preguntarle sobre ellos y sobre sus contribuciones en su equipo…
– Creo que ilustran muy bien, ambos, el valor de tener físicos en la neurociencia. Aportan mucha fuerza cuantitativa. Son personas muy inteligentes que tienen muchas herramientas analíticas y conceptuales, pero también son personas muy amables. Ambos. Creo que es una buena combinación: personalidad agradable, intelecto y un entorno único. Estoy ansioso por encontrar más de este tipo de personas de Bariloche. Con suerte, algunos volverán y traerán su enfoque experimental de combinación también algún día.

-Si pudieras elegir la característica más maravillosa del cerebro, ¿cuál elegiría?
-(risas) Eso es difícil de decir. Creo que el hecho de que siempre encuentra una solución inesperada. Esa es quizás la característica más sorprendente. Todavía estamos en el comienzo del estudio del cerebro y todavía quedan muchas sorpresas. Quizás sea lo más maravilloso para mí.

-Lo desconocido…
-Hay tanto sin conocer, tantas formas sorprendentes de hacer las cosas y, de hecho, algunas formas muy inteligentes una vez que las ves…

-Sin decirlo, está hablando de creatividad, curiosidad…
-Creo que esto también subyace en las cosas más complejas como la creatividad y la curiosidad, sobre las cuales no sabemos mucho hoy. Pero estamos empezando a ver los elementos de, por ejemplo, la creatividad. En el caso de la creatividad, involucra un cierto elemento de la memoria, implica un cierto grado de planificación o mirar hacia adelante en el tiempo y por lo tanto… Pero me refiero a cómo se obtienen nuevas ideas, todavía somos… Es decir, hay gente que está comenzando a investigar estos temas. Hay mucho por conocer.