El arranque de Barakah 2, tan solo un año después del inicio de la unidad 1, explica ENEC, “resalta el progreso significativo que se está logrando para poner en operación las cuatro unidades del emplazamiento de Barakah para descarbonizar rápidamente el sector energético de los EAU, […] impulsando aún más el crecimiento económico de la nación y ofreciendo electricidad de forma limpia, segura, constante y abundante”. Y añade: “Este logro demuestra las amplias capacidades de la nación en la ejecución del programa nuclear de los Emiratos Árabes Unidos, que cumple con todas las regulaciones nacionales y estándares internacionales”, así como las habilidades, capacidades y competencias de sus profesionales.
El director ejecutivo de ENEC, Mohamed Ibrahim Al Hammadi, quien trató de momento histórico el inicio de la operación comercial de la unidad 1, considera por su parte que se ha alcanzado un nuevo hito importante en la ejecución del programa nuclear del país “como parte de nuestro camino para suministrar electricidad limpia y abundante las 24 horas del día, los 7 días de la semana”.
Este directivo cree que “la planta de Barakah apoya el crecimiento sostenible y la prosperidad de la nación. Con la puesta en marcha de la unidad 2 estamos casi a la mitad de lograr nuestro objetivo de suministrar hasta una cuarta parte de las necesidades de electricidad de nuestra nación y permitir el crecimiento sostenible alcanzando los objetivos de cambio climático de los EAU”.
Las pruebas de arranque se han llevado a cabo con la supervisión del regulador nuclear independiente de los Emiratos Árabes Unidos, la Autoridad Federal de Regulación Nuclear (FANR), y tras una revisión previa por parte de la Asociación Mundial de Operadores Nucleares (WANO) para confirmar que la unidad 2 esté alineada con las mejores prácticas internacionales en la industria nuclear.
Próximamente, la unidad 2 se conectará a la red eléctrica nacional y los operadores nucleares continuarán con un proceso de aumento gradual de los niveles de potencia. Este proceso será monitoreado y continuamente revisado hasta que se alcance la producción máxima de electricidad, mientras se cumplen todos los requisitos reglamentarios y los más altos estándares internacionales de seguridad, calidad y protección, explican desde la empresa titular de la central.
Las cuatro unidades que se instalarán en el emplazamiento de Barakah producirán 5,6 gigavatios de electricidad a la vez que evitarán la liberación de más de 21 millones de toneladas de emisiones de carbono cada año, equivale a retirar de las carreteras 3,2 millones de coches anualmente.
