La central nuclear Ascó (España) concluyó con éxito el simulacro anual del Plan de Emergencia Interior (PEI), un ejercicio preventivo basado en escenarios hipotéticos que la instalación debe realizar cada año.
En esta oportunidad, el ejercicio se basó en la reproducción de un escenario de pérdida de suministro de energía eléctrica exterior al emplazamiento, el cual afectó a las dos unidades de la central nuclear.
Por otro lado, se simuló la evolución negativa de una de las unidades hasta llevar a este grupo a la pérdida total de energía eléctrica alterna interior y la pérdida de integridad de la contención con el consiguiente impacto radiológico en el exterior.
El simulacro –que contó con la participación de inspectores del Consejo de Seguridad Nuclear de España, además de auditores internos independientes– permitió poner en práctica también el relevo de algunos puestos de gestión de la emergencia.
Con el objetivo de poder comprobar el buen funcionamiento de todos los protocolos e intervinientes ante una emergencia, durante el ejercicio se activaron todas las organizaciones implicadas en el Plan de Emergencia Interior, así como las vías de comunicación.
La realización de estos ejercicios una vez por año permite que la organización de respuesta a la emergencia se mantenga operativa y, a su vez, localizar áreas y oportunidades de mejora que permiten avanzar hacia una mayor efectividad.
