Las centrales nucleares verde amarelo

fotos-edicion-impresa-10Por Laura Cukierman. En U-238 # 14 Noviembre 14.

El recorrido por las centrales nucleares del mundo nos lleva, en esta oportunidad, a Sudamérica. Junto con la Argentina, Brasil es el único país de la región que cuenta con centrales nucleares de generación eléctrica. Son las centrales Angra I y Angra II, ubicadas en el Estado de Río de Janeiro. Ambos reactores están conectados a la red eléctrica del país desde 1982 y 2000, respectivamente. El proyecto de Brasil es seguir creciendo en materia nuclear: para 2030 proyecta contar en su territorio con entre cuatro y ocho centrales nuevas.

América Del Sur no tiene un desarrollo parejo en materia de energía nuclear. Brasil y Argentina son los únicos dos países de la región que cuentan con centrales nucleares utilizadas para la generación de energía eléctrica, y que tienen planes de construir nuevas plantas.

En Brasil, el 3,1% del suministro total de electricidad es generado por medio de energía nuclear. El país inició las investigaciones en esta área en los años 50 y aspira a convertirse en exportador de combustible nuclear. Actualmente, los brasileños cuentan con dos plantas nucleares en funcionamiento y una en construcción. Por otra parte, hacia 2030 se prevé la creación de entre cuatro y ocho nuevas centrales.

La Central nuclear Almirante Álvaro Alberto (CNAAA) fue bautizada así en homenaje al investigador pionero de la tecnología nuclear en Brasil y principal articulador de una política nacional para el sector. Es también conocida como Central Nuclear Angra y se encuentra ubicada en la Praia de Itaorna, en Angra dos Reis, en el Estado de Río de Janeiro. Esta central está formada por dos reactores de agua liviana presurizada (PWR): Angra I, con una potencia de salida neta de 626 MWe, que fue el primero que se conectó a la red en 1982, y Angra II, con una potencia de salida de 1275 MWe, conectado en 2000. Está planificado un tercer reactor, Angra III, con una potencia instalada proyectada de 1.245 MWe, cuya construcción comenzó el 1º de junio de 2010.

Este complejo es administrado por Eletronuclear, una compañía estatal que cuenta con el monopolio de la generación de energía nuclear en brasil. Actualmente da empleo a unas 3000 personas y genera otros 10 000 puestos de trabajo indirectos en Río de Janeiro.

Angra I
En 1968, el Gobierno Brasileño decidió ingresar en el campo de la producción de energía nucleoeléctrica, con el objetivo primordial de propiciar al sector eléctrico la oportunidad de incluirse en esta moderna tecnología y adquirir experiencia para enfrentar posibles necesidades futuras. Como ya estaba prevista una complementación termoeléctrica en Rio de Janeiro, se decidió la construcción de una usina nuclear de cerca de 600 MW. La construcción de Angra I comenzó en el año 1972, la primera reacción nuclear en cadena fue establecida en marzo de 1982 y la planta entró en servicio comercial en 1985. Desde esta fecha, ya generó más de 22 millones de MWh, energía suficiente para abastecer una ciudad de aproximadamente 1 200 000 habitantes. En sus ciclos más recientes, Angra I operó con un factor de disponibilidad superior al 85% y en el último ciclo llegó al 95,8%, con una potencia media de alrededor del 100%, lo que la ubica entre las centrales de mejor desempeño. Esta primera central nuclear fue adquirida bajo la forma de turn key, es decir, como un paquete cerrado, que no preveía transferencia de tecnología por parte de los proveedores. Algo que fue completamente previsto y modificado en la construcción de Angra II.

Angra II
En junio de 1975, el gobierno brasileño firmó con la entonces República Federal de Alemania el Acuerdo sobre Cooperación para Usos Pacíficos de la Energía Nuclear. Dentro de este acuerdo, se concretó la compra de las centrales de Angra II y III a la empresa alemana Kraftwerk Union A.G.-KWU, subsidiaria de la SIEMENS S.A. Con algunos conflictos durante el proceso de construcción, en 2001 comenzó a funcionar con una potencia de 1.350 megavatios. Actualmente, Angra II opera con un reactor tipo PWR (agua presurizada) y genera 10,5 millones de megavatios/hora por año, cantidad suficiente para atender a un tercio de la demanda del Estado de Río de Janeiro o a una población cercana a los cinco millones de habitantes. Como posee el más grande generador eléctrico del hemisferio Sur, Angra II contribuye con su energía para que los reservatorios de agua que abastecen las hidroeléctricas sean mantenidos en niveles que no comprometan el abastecimiento de electricidad de la región económicamente más importante del país.

Angra III
Angra III fue comprada conjuntamente con Angra II, con el objetivo de reducir costos y expandir las plantas ya existentes. La fecha inicial para su puesta en operación era diciembre de 1984, pero esto estuvo lejos de ocurrir. En 1991, el gobierno decidió suspender los trabajos de Angra III y concentrar todos los recursos para terminar Angra II. En 1996, la Eletrobras resolvió incluir Angra III en el Plan Decenal para su puesta en operación en 2005, pero esto tampoco ocurrió. Recién este año se alcanzará la mitad de su construcción y su entrada en servicio está prevista para mayo de 2018. Así, se convertirá en la planta más grande de América Latina.

Angra III será de las tres la de mayor capacidad de generación y podrá responder por las demandas crecientes de una economía como la brasileña.

Argentina y Brasil unidas por lo nuclear
Los dos países construyeron una diplomacia nuclear con fines pacíficos al crear, en 1991, la Agencia Brasileño-Argentina de Contabilidad y Control de Materiales Nucleares, la cual se encarga de verificar sus actividades atómicas civiles y militares. Es la única agencia de este tipo en el mundo y tiene como objetivo evitar la proliferación y propiciar el desarme.

Uranio enriquecido
Desde 2004, la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) autorizó a Brasil a producir uranio enriquecido, que ya cuenta con yacimientos de uranio. Brasil se ha convertido en el sexto país con reserva de este tipo en el mundo, con unas 310 000 toneladas. Pero hay estimaciones de que podría albergar hasta 800 000 toneladas.