El combustible nuclear gastado es altamente radiactivo y durante el transporte puede ser un blanco potencial de robo o sabotaje. Por lo tanto, su transporte entre instalaciones requiere una planificación cuidadosa y la implementación de numerosas medidas de seguridad.
En el Reino Unido, que cuenta con 15 reactores de energía nuclear, las empresas especializadas han estado transportando de manera segura el combustible gastado dentro y fuera del país durante las últimas décadas, cubriendo una distancia total de más de 19 millones de kilómetros. Un marco regulatorio sólido y una comunicación efectiva entre las partes interesadas han sido clave para su éxito, dijeron los actores de la industria.
Por: Nathalie Mikhailova , Oficina de Información y Comunicación Pública del OIEA.
En el Reino Unido, los envíos de combustible gastado se realizan regularmente: un envío de combustible ocurre en algún lugar del país casi todas las semanas. La mayor parte del combustible gastado de los reactores de potencia ha sido, y continúa siendo, transportado a las instalaciones de Sellafield en Cumbria, Inglaterra. Gran parte del transporte de combustible gastado es proporcionado por Direct Rail Services, que ha estado transportando material nuclear desde 1995 sin incidentes relacionados con la liberación de radiación.
«Tenemos las capacidades y la infraestructura para el transporte seguro del combustible gastado y, sobre todo, tenemos décadas de experiencia», dijo John Mulkern, Secretario General del World Nuclear Transport Institute (WNTI), una organización de red que representa intereses colectivos del sector del transporte de material nuclear. «Esta experiencia es particularmente valiosa en el contexto de los países que inician programas de energía nuclear y, por lo tanto, buscan desarrollar los sistemas de transporte necesarios».
Desarrollar y mantener un marco sólido para un transporte efectivo.
El OIEA ayuda a los países en el desarrollo y la implementación de estrategias de transporte de conformidad con las normas de seguridad pertinentes del OIEA. La Autoridad de Aviación Civil Internacional para el transporte aéreo ha adoptado los Requisitos de seguridad específicos en virtud de los Reglamentos para el transporte seguro de materiales radiactivos (Serie de normas de seguridad del OIEA No. SSR-6 (Rev.1)), para el transporte aéreo. por mar y por las autoridades reguladoras nacionales para el transporte terrestre, tanto por carretera como por ferrocarril.
Los requisitos de SSR-6 (Rev.1), publicados en 2018, incluyen actividad y clasificación de material radiactivo, definición y contenido permitido de los tipos de paquetes, rendimiento del diseño del paquete y criterios de prueba para cada tipo. Para cada tipo de paquete, define los requisitos para la aprobación del diseño por parte de las autoridades reguladoras nacionales antes de su uso y periódicamente después; documentación, etiquetado y marcado de paquetes; temperatura de la superficie externa, límites de radiación y contaminación; límites de envío; y entrenamiento.
En el caso del embalaje, los requisitos se basan en el nivel de peligro del material a contener. Para el material radiactivo de alto riesgo, como el combustible gastado, el embalaje debe cumplir con los requisitos de diseño y rendimiento prescritos para resistir accidentes de transporte severos que involucren impacto e incendio sin una liberación significativa de su contenido. Esto se determina mediante pruebas rigurosas del material en diversas situaciones. British Nuclear Fuels Limited, por ejemplo, ha llevado a cabo una serie de demostraciones públicas que simulan accidentes de un tren golpeando un barril de combustible gastado a velocidades de casi 160 km / h. Se causó poco daño al barril, lo que demuestra su seguridad (ver Transporte de combustible nuclear gastado ).
“Otro aspecto importante del transporte es cómo aseguramos a las comunidades por las que viajan estos materiales que están a salvo y seguros. Cuando las personas ven barriles, a menudo tienen preocupaciones ”, dijo Mulkern. International Nuclear Services, una empresa involucrada en la gestión y transporte de combustible nuclear, por ejemplo, celebra reuniones periódicas de la comunidad y las partes interesadas en Barrow-inFurness, una ciudad portuaria en el norte de Inglaterra con enlaces ferroviarios directos al sitio de Sellafield, para discutir qué se están transportando a través del condado y en todo el mundo, y cómo es seguro y protegido.
El transporte de materiales peligrosos también implica la prevención de posibles actos de robo o sabotaje, lo que requiere una protección física adecuada no solo a través del diseño del contenedor, sino también a través de los procedimientos de seguridad pertinentes. El OIEA ayuda a los países, previa solicitud, con el desarrollo y mantenimiento de regímenes de protección física, incluso mediante el apoyo en la redacción de reglamentos de seguridad del transporte y ejercicios de seguridad del transporte. El propósito de tales ejercicios es identificar cualquier debilidad potencial en el régimen de seguridad del transporte y hacer las mejoras necesarias.
Planeando para el futuro
«En el futuro, es importante seguir alentando a las personas más jóvenes a participar directamente en la industria nuclear, particularmente en el sector del transporte», dijo Mulkern. “Se están construyendo nuevas plantas de energía en todo el mundo, por lo que debemos asegurarnos de que la experiencia y los conocimientos existentes se entreguen de manera adecuada. Las personas deben tener no solo la información, sino también la experiencia de realizar envíos, ya sea que impliquen combustible gastado o desmantelamiento, así como la confianza para transportarlos de la manera correcta. Necesitamos continuar transportando de manera conforme y comunicar adecuadamente lo que estamos haciendo y por qué es seguro ”.
LA CIENCIA
Transporte de combustible nuclear gastado
Los tipos de paquetes y sus criterios de rendimiento para el transporte de material radiactivo se definen de acuerdo con el peligro que representan sus contenidos y las condiciones bajo las cuales se espera que los paquetes retengan la contención y el blindaje del material radiactivo. Los llamados paquetes Tipo B se utilizan para transportar materiales con niveles más altos de radiactividad, como el combustible gastado. Están diseñados no solo para resistir el calor generado por su contenido radiactivo, sino también para sobrevivir a accidentes de transporte severos sin fugas significativas del combustible gastado contenido en ellos.
El transporte de material nuclear también conlleva requisitos específicos para el marcado y etiquetado de paquetes y la rotulación de medios de transporte, así como para la documentación, límites de radiación externa y contaminación, controles operativos, garantía y notificación de calidad, y aprobación de ciertos envíos y tipos de paquetes.
Este artículo apareció en la edición del Boletín de junio de 2019 del OIEA sobre la gestión del combustible gastado de los reactores de energía nuclear .
