Al celebrarse 25 años de la creación de la Agencia Brasileño-Argentina de Contabilidad y Control de Materiales Nucleares (ABACC), Rafael Grossi, Embajador de la Argentina ante el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), expresó que “se trata de uno de los aniversarios más dignos de recuerdo y de homenaje que registra la política exterior contemporánea en nuestro país, en la región y en el mundo”.
“Hace veinticinco años –afirmó Grossi- nuestros dos países dieron el paso decisivo para consolidar un proceso de acercamiento mutuo que había comenzado antes, pero que tuvo un impulso lógico y decisivo tras la recuperación de la democracia en ambos países. La Argentina y el Brasil, habiendo reencontrado su institucionalidad dieron por tierra con décadas de especulaciones febriles acerca de la posibilidad de desarrollar armamentos nucleares”.
El embajador subrayó que “la ABACC opera exitosamente como un ejemplo de inspecciones regionales confiable, eficazmente entrelazado al sistema de inspecciones internacionales del Organismo Internacional de Energía Atómica por la vía del Acuerdo Cuadripartito (Argentina, Brasil, ABACC, OIEA)”. Asimismo, comparó: “El ejemplo de un sistema regional de verificación, solo comparable en el mundo al de EURATOM, ha dado cabida a un interés creciente en otras regiones del mundo, como el Asia Meridional, o la Península coreana, en donde los actores regionales involucrados no pudieron tener la suerte de contar con dirigencias políticas que supieran o pudieran identificar el bien común nacional y regional”.
Al enumerar los logros alcanzados por el Plan Nuclear Argentino en los últimos tiempos, Grossi destacó: “Todos estos logros comienzan y se construyen sobre el zócalo histórico de la integración con Brasil, en el establecimiento de una Política Nuclear Común con el hermano país y en una institucionalidad no declamada sino ejercida y verificada a través de un régimen de inspecciones en las instalaciones nucleares de ambos países a través de la ABACC”.
Para terminar, el diplomático aseguró que la ABACC “tiene mucho de lo que enorgullecerse, pero tiene también un camino importante de desafíos por delante, dictados por el crecimiento de las actividades nucleares en ambos países y por la multiplicación de las amenazas a la paz y a la seguridad internacionales, que nos obligan a una actitud serena pero vigilante. Este 25º aniversario de la ABACC nos encuentra a argentinos y brasileños caminando juntos, y dando desde el sector nuclear garantías al mundo de nuestro compromiso por la paz”.