Un informe publicado por el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) indica que realizar la trasformación a un suministro de energía con bajas emisiones de carbono será más costoso si las opciones de fuentes energéticas de bajas emisiones de carbón, incluyendo la energía nuclear, no se implementan «de manera oportuna y a potencia completa».
En el informe Climate Change and Nuclear Power 2016, el OIEA argumenta que alcanzar la meta de 2°C definida en el acuerdo climático de París del pasado año 2015 e implementar la descarbonización necesaria del suministro energético suponen un reto enorme.
Según la publicación, muchos países tienen intención de aumentar la generación eléctrica nuclear para contribuir a la descarbonización de manera rentable. Esto hace que sea necesaria una fuerte voluntad política y una acción coordenada por la comunidad internacional y las empresas multinacionales.
Por otro lado, el informe señala que la capacidad nuclear necesaria para alcanzar las estrictas metas climáticas del acuerdo de París es de 950 GW para 2050, más del doble de la capacidad mundial de los 441 reactores comerciales que están en operación hoy en día, y que a finales de 2015 sumaba 383 GW.
Poner en marcha un proyecto de gran escala como este, teniendo en cuenta los horizontes de planificación, el tiempo necesario para la producción de componentes y las capacidades limitadas de la industria, es un reto muy importante para la industria nuclear, asegura el OIEA.