La empresa metalúrgica Secin S.A. terminó la obra de la pileta del rector y la pileta de servicios del RA10, el reactor nuclear multipropósito que la CNEA construye junto a Invap en el Centro Atómico Ezeiza. Junto a las instalaciones del reactor funcionará el Laboratorio Argentino de Haces de Neutrones (LAHN), donde se formará a profesionales y técnicos, a fin de alcanzar capacidades de investigación en ciencias básicas y aplicaciones tecnológicas que contribuyan a la conformación de un polo regional de ciencia y tecnología.
La pileta es uno de los componentes fundamentales de este reactor, dado que alojará el núcleo de componentes conformado por los elementos combustibles, las barras de control y demás dispositivos que lo constituyen. Por su parte, la pileta de servicios constituirá el recinto que permitirá aprovechar sus distintas funcionalidades. La pileta del reactor –que equivale a la vasija de presión si se tratase de un reactor de potencia– es un componente estratégico porque alojará el núcleo del RA-10. Posee 14 metros de altura por 4,5 metros de ancho. A sus costados se pueden ver los distintos cilindros que serán acoplados a las tuberías que permitirán su funcionamiento.
Al realizar la entrega simbólica de este componente vital del RA-10, el presidente de Secin S.A., Luis Manini, valoró la exitosa interacción público-privada que se dio entre la CNEA, Invap y la empresa, y auguró la continuidad de este tipo de proyectos que consolidan la especialización alcanzada a través de este tipo de experiencias de trabajo en conjunto.
A su vez el gerente del Proyecto RA-10, Herman Blaumann, también ponderó que el principal insumo del recipiente de 14 metros de alto que será instalado en Ezeiza es “la materia gris de los ingenieros y técnicos que en CNEA e Invap realizaron el diseño, como así también la capacitación adquirida por los soldadores de Secin S.A., que recibieron certificados de aptitud para los exigentes requerimientos de la industria nuclear».
Por su parte el Director Nacional de Políticas Nucleares de la Subsecretaría de Energía Nuclear del Ministerio de Energía y Minería de la Nación, Lic. Facundo Deluchi, destacó que este hito confirma “la sostenibilidad de los proyectos nucleares en cuanto a la capacidades humanas existentes y los resultados obtenidos porque, no sólo ponen a la Argentina como un jugador clave en la prestación de servicios y de producción de radioisótopos a nivel mundial, sino que también generan beneficios concretos en lo económico y social”.
Para su montaje las piletas serán trasladas en una sola pieza desde la planta industrial de Secin, en Quilmes, hasta el Centro Atómico Ezeiza, en el mes de septiembre. Se espera que este componente supere una vida útil de 60 años.
Una vez que esté funcionando, el RA-10 asegurará el abastecimiento de radioisótopos para uso médico a nivel nacional y tendrá capacidad para exportar al mercado mundial. Esto generará un impacto estratégico para nuestro país en áreas de salud, ciencia, investigación aplicada, desarrollo tecnológico y servicios.
Fuente: www.cnea.gov.ar