Balseiro: egresan 16 estudiantes de ingeniería

A pesar de los obstáculos por la pandemia de COVID-19, y luego de un novedoso cuatrimestre con clases virtuales, se acaban de recibir de dos carreras de Ingeniería del Instituto Balseiro. Las defensas de sus proyectos integradores se realizaron también a través de una plataforma virtual

El primer semestre de 2020 fue diferente: aislamiento preventivo, clases virtuales, infodemia y mucha incertidumbre debido a la pandemia de COVID-19. A pesar de las dificultades y apoyándose en las oportunidades que brindan las telecomunicaciones del siglo XXI, desde fines de junio hasta fines de julio se realizaron las defensas de los proyectos integradores de las y los integrantes de la  41ª Promoción de Ingeniería Nuclear y la 16ª promoción de Ingeniería Mecánica del Instituto Balseiro. Así, se recibieron en total 16 flamantes egresados en total.

El Instituto Balseiro, que depende de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) y la Universidad Nacional de Cuyo (UNCUYO), tiene ahora ocho nuevos egresados de Ingeniería Mecánica. Son: Sebastián Calvera López, Nicolás Hatem Martín, Tomás Liendro, Tomás Molina, Nicolás Morgan, Santiago Pires, Thomás Coronel y Gustavo Cruz.
También egresaron ocho profesionales de Ingeniería Nuclear. Son: Osiris Inti Abbate, Luciano Cuezzo, Pablo Chocobar Cruz, Mauricio Debárbora, Andrea Gómez, Martín Marone, Marianella Montaño Rojas y Kevin Ruiz.  

La Dra. Ing. Graciela Bertolino, vicedirectora del Área Ingeniería del Instituto Balseiro, expresó: “Hay que remarcar el esfuerzo no sólo en poder continuar y finalizar los cursos sino también el gran esfuerzo en poder terminar los proyectos, algunos de ellos con contenidos experimentales importantes”.

El director del Instituto Balseiro, Dr. Ing. Mariano Cantero, destacó: “Es una gran alegría que estos 16 estudiantes hayan podido terminar sus carreras en esta coyuntura de pandemia. Ha habido un gran esfuerzo de estudiantes, docentes y personal de gestión, apoyo y técnico para poder llevar adelante la institución durante la pandemia. Se continúa honrando la historia de 65 años formando recursos humanos y generando conocimiento para Argentina”.

CIUDADES Y UNIVERSIDADES DE ORIGEN
En el grupo de egresades de Ingeniería Mecánica, el rango de edades varía de 23 a 25 años y provienen de cinco provincias, seis universidades y siete ciudades: Buenos Aires (Tandil, La Plata y Moreno), Mendoza (Godoy Cruz), Salta (ciudad de Salta), Santa Cruz (Río Turbio) y Tucumán (San Miguel de Tucumán) y las universidades son la Universidad de Buenos Aires, Universidad Nacional de Cuyo, Universidad del Centro de la Provincia de Buenos Aires, Universidad Nacional de Salta, Universidad Tecnológica Nacional (Haedo) y Universidad Nacional de Tucumán.

En el grupo de Ingeniería Nuclear, el rango de edades varía de 23 a 31 años, provienen de siete provincias y universidades y ocho ciudades: Buenos Aires (Tandil), Chubut (Comodoro Rivadavia), Córdoba (ciudad de Córdoba), Jujuy (Humahuaca y San Salvador de Jujuy) Mendoza (Godoy Cruz), Misiones (Posadas) y Tucumán (San Miguel). Las casas originales son: Instituto Tecnológico de Buenos Aires, Universidad de Buenos Aires, Universidad Nacional de Córdoba, Universidad Nacional de Cuyo, Universidad Nacional de Misiones, Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco y Universidad Nacional de Tucumán

BALANCE DE ESTUDIAR EN EL BALSEIRO

A partir de una invitación a participar en una serie de videos para Instagram, cuatro estudiantes que ya egresaron, hicieron un balance de cómo fue estudiar en el Balseiro, contaron en pocos minutos de qué trató cada proyecto integrador y qué piensan hacer a futuro. Para esta nota, se citan las principales ideas presentadas en estos videos, que se pueden ver en el canal de YouTube del Instituto .

“Lo que más me gustó de estudiar en el Instituto Balseiro fue esa idea de mejora continua que se logra a través de esfuerzo y dedicación. El Instituto te forma para que te enfrentes al problema, aprendas a equivocarte las veces que te tengas que equivocar y termines encontrando una solución”, cuenta el Ingeniero Mecánico Sebastián Calvera, oriundo de Mendoza y de 22 de años de edad.

Calvera, que en su proyecto integrador de Ingeniería Mecánica trabajó en el desarrollo de un dispositivo que permite estudiar muestras sensibles en un microscopio electrónico, cuenta que tiene el plan de viajar apenas sea posible. “Quiero aprender de otras culturas, cómo se hacen las cosas en otros lugares y quizás encarar algún posgrado. En el futuro me quiero dedicar al desarrollo y la innovación”, dice.

Tomás Liendro, de 23 años y oriundo de Villa Carlos Paz, Córdoba, destaca varias características que le gustaron del Balseiro. “La gran cantidad de equipamiento disponible para los alumnos a la hora de llevar a cabo las materias prácticas y experimentales; la gran cantidad de docentes que tenemos a disposición para realizar consultas, muchos de ellos investigadores de CNEA y CONICET y todos docentes de excelente calidad; y el entorno académico en el cual el Balseiro se encuentra, rodeado por paisajes naturales, es algo que lo transforma en una experiencia única”, describe el joven.

El proyecto integrador de Liendro, de Ingeniería Mecánica, se basó en el desarrollo de una plataforma de controladores híbridos para una plataforma robótica. “Diseñé e implementé un robot capaz de planificar misiones de forma independiente y automática, sin la necesidad de un operario externo”, sintetiza. A futuro, tiene planeado seguir su formación con la Maestría en Ingeniería del Balseiro. “Voy a trabajar en el desarrollo de controladores adaptativos para el vuelo seguro de drones y también voy a trabajar para una empresa en el desarrollo de sistemas satelitales de telecomunicaciones”, adelanta.

Por su parte, Inti Abbate, que tiene 23 años y proviene del El Bolsón, destaca que lo que más le gustó de estudiar en el Balseiro fue la oportunidad de independizarse, ya que todos los estudiantes que ingresan al Instituto reciben becas de la CNEA para poder estudiar sin preocupaciones económicas. “Por primera vez viví lejos de mi familia y me establecí con mi novia en una casa que alquilamos”, cuenta. Y destaca que de ese modo se acercó un poco más al camino de la madurez y la adultez.

En su proyecto integrador de Ingeniería Nuclear, Abbate desarrolló una cadena de cálculo para asistir a los cálculos de blindaje alrededor de guías de neutrones, en vinculación con el proyecto RA-10 de la CNEA. El objetivo fue asegurar que las paredes de “los blindajes sean adecuados para la protección radiológica de los trabajadores”, destaca. Su plan es continuar con una Maestría. “Me gusta, al menos por ahora, ser estudiante en el Balseiro y llevar este estilo de vida. Después veré, pero mi plan a mediano plazo es seguir en Bariloche”, expresa.

Por último, Tomás Molina, de 24 años y proveniente de Tandil, también aceptó participar en la serie de videos “Egresados”. Ante un pedido de balance de su paso por el Instituto, responde: “Lo que me llevo de haber estudiado en el Balseiro fue conocer a un montón de gente muy motivada a aprender y progresar en su vida. Esto me ayudó a entender quién soy y a dónde puedo llegar”.

En su proyecto integrador de Ingeniería Mecánica, diseñó y construyó una máquina de ensayo de flujo de calor. “Este parámetro es muy importante ya que en varias industrias, como la industria nuclear, determina con qué densidades de potencia se puede llevar a trabajar”, comenta. Y destaca que aún no sabe si va a empezar a trabajar o si continuará sus estudios. “En la proximidad, quiero volver a ver mi familia que es algo que en último año no pude hacer”, dice.

En esta ocasión, no se pudo hacer un acto de colación como es tradición en el Instituto Balseiro, el cual se ha reprogramado a futuro para cuando el contexto lo permita. De todas maneras, este lunes comenzaron las clases virtuales para seguir formando a más profesionales de ingeniería y física, con nuevas estrategias y soluciones frente a la pandemia.



Por Área de Comunicación del Instituto Balseiro.