El pasado viernes 17 de mayo, la Central Nuclear de Trillo –ubicada en el municipio homónimo en Guadalajara, España– inicio la vigésimo quinta recarga de combustible y mantenimiento general, en una parada que tendrá una duración aproximada de un mes.
Durante ese lapso de tiempo, se desarrollará, además, un plan de actividades que abarca las revisiones y comprobaciones periódicas de equipos, sistemas y componentes entre los que cabe destacar: sustitución de 40 elementos combustibles; cambio de 30 barras de control de los 52 conjuntos existentes y cambio del motor de una de las tres bombas principales del circuito primario.
Por otro lado, también se realizará una prueba de presión del recinto de contención, la revisión electromecánica de las redundancias y la inspección a través de ultrasonidos de los pines de centrado de los internos superiores de la vasija del reactor.
Para realizar todos estos trabajos, la central contrató los servicios de más de cuarenta empresas especializadas que emplearán cerca de mil trabajadores adicionales.
Según se informó desde la central, de todas las actividades programadas aproximadamente el 68% corresponden a trabajos de mantenimiento preventivo, el 12% a trabajos de mantenimiento correctivo y el 20% restante a la implantación de las diferentes modificaciones de diseño.