La planta comenzó a funcionar en 1972 y se cerró el 20 de diciembre de 2019.
La empresa suiza BKW anunció que todo el combustible nuclear de la central nuclear parada de Mühleberg ha sido transportado al almacén temporal de Zwilag en Würenlingen. La retirada del combustible marca la finalización de la primera de las tres etapas de desmantelamiento de la planta.
La planta, que consta de un único reactor de agua en ebullición de 373 MWe, comenzó a funcionar en 1972 y se cerró el 20 de diciembre de 2019. Las operaciones de desmantelamiento comenzaron el 6 de enero de 2020.
Mühleberg se desmantelará en tres fases de desmantelamiento. La primera fase dura hasta que se hayan retirado todos los conjuntos combustibles de la planta. La segunda fase finaliza con el levantamiento o limpieza de las zonas controladas, mientras que la tercera fase incluye trabajos para demostrar que el sistema ya no es una fuente de peligro radiológico.
Cuando la planta dejó de funcionar había 418 elementos combustibles. Estos se enfriaron en la piscina de almacenamiento de combustible de Mühleberg hasta que estuvieron listos para el transporte. En abril de 2022 se enviaron los primeros elementos combustibles usados al almacén provisional de Würenlingen, a lo que siguieron varias campañas de transporte. Se necesitaron un total de 66 envíos para transportar todo el combustible.
«Gracias a una planificación rápida y a la amplia experiencia consolidada de los empleados involucrados, todos los trayectos de transporte se desarrollaron sin problemas», afirmó Stefan Klute, director del área nuclear de BKW.
La compañía señaló que el hito de retirar todo el combustible de la planta se alcanzó 16 meses antes de la fecha prevista originalmente, fijada en 2015.
«Con la eliminación de los últimos elementos combustibles, el nivel de radiactividad en KKM se ha reducido en más del 99%», aseguró BKW.
Además, la empresa señaló que «la retirada temprana de combustible nuclear tiene un impacto positivo en los procesos restantes del desmantelamiento” y remarcó: “Ya no se aplican los requisitos reglamentarios para el enfriamiento de los elementos combustibles y el control de la reactividad. Otros sistemas pueden ser desmantelados, y algunos procesos serán mucho más sencillos sin combustibles nucleares».
A finales de junio de 2022, BKW presentó su solicitud a la Inspección Federal Suiza de Seguridad Nuclear (ENSI) para la segunda fase de desmantelamiento de Mühleberg.
Durante esa fase, todos los componentes restantes de la planta que hayan entrado en contacto con la radiactividad serán desmantelados, tratados y limpiados. Entre ellos se incluyen, por ejemplo, la vasija de presión del reactor, partes del contenedor o la piscina de almacenamiento de elementos combustibles que ya no son necesarias.
Para 2030, Mühleberg estará libre de material radiactivo y el desmantelamiento convencional comenzará en 2031. Se espera que el sitio esté disponible para otros usos a partir de 2034.