Ocho piezas del interior del reactor de la central nuclear en desmantelamiento de José Cabrera –llamada popularmente Zorita– fueron enviados a Suecia para ser analizadas con motivo del Zorita Internals Research Project. El objetivo de esta investigación es determinar el comportamiento de los materiales que han sido activados por un flujo neutrónico durante un largo periodo de tiempo.
Para trasladar estas piezas, de 40 kilogramos de peso cada una, se utilizó un contenedor cilíndrico especial, que viajó por carretera hasta el puerto de Santander, desde donde salió rumbo al país nórdico. Previamente, fue necesario realizar ligeras modificaciones en el Edificio Auxiliar de Desmantelamiento (EAD) de la central, encaminadas a permitir la entrada del contenedor en el recinto de contención y, en último extremo, la carga bajo agua de las muestras de material.
El desmantelamiento de una central nuclear como la de José Cabrera ofrece una oportunidad única para estudiar cómo cambian con el tiempo y la radiación los principales componentes de un reactor nuclear, aspecto en el que la comunidad científica y técnica internacional ha mostrado un gran interés.