El titular de la central nuclear Vandellós II informó que, siguiendo el procedimiento establecido, a las 17:21 horas del día 10 de octubre se produjo la parada automática del reactor debido a la pérdida de la línea de alimentación eléctrica exterior de 400 KV, producida por una fuerte tormenta en la zona. Previamente se había perdido la línea de 220 KV.
La ausencia de alimentación eléctrica provocó que el titular de la instalación declarase, según se establece en su Plan de Emergencia Interior, prealerta de emergencia. Durante el evento, los sistemas de seguridad de la instalación funcionaron según diseño y los generadores diesel arrancaron, suministrando la energía eléctrica necesaria para el funcionamiento de los equipos de emergencia.
A las 18:45 horas, y una vez recuperada la alimentación eléctrica exterior, el titular desactivó la prealerta de emergencia. Posteriormente, se informó que el suceso -que no tuvo impacto en los trabajadores, el público ni en el medio ambiente- se clasificó con nivel 0 en la Escala Internacional de Sucesos Nucleares y Radiológicos (INES).