Profesionales del Instituto de Ciencias Básicas (Universidad Nacional Cuyo) y de la Fundación Escuela de Medicina Nuclear (FUESMEN, CNEA) se encuentran evaluando nuevas terapias para tratar el cáncer. Las mismas consisten en el desarrollo de tratamientos más personalizados, teniendo en cuenta el comportamiento del tumor en cada paciente.
Actualmente, los tratamientos oncológicos son de base poblacional, es decir, se realizan sobre un promedio de cómo los pacientes responden a las terapias. Pero, a partir del desarrollo este nuevo sistema, los procedimientos podrán ser más personalizados, según las características del tumor y del paciente que lo posea.
Para ello, se vuelve necesario analizar profundamente los tumores a través de imágenes moleculares que se obtienen mediante la técnica de imágenes PET/CT. Estas permiten conocer cómo se comporta el tumor, además de indicar dónde se localiza y cuál es su tamaño y forma.
Asimismo, estos nuevos métodos permiten evaluar cómo responde cada paciente a su tratamiento al realizar imágenes moleculares. De esta manera, es posible pronosticar la evolución terapéutica, lo que conlleva un seguimiento más específico de los pacientes y posibilita adaptar el tratamiento, de ser necesario.
Si bien estos métodos aún están a prueba en Mendoza, ya comenzaron a utilizarse en países más avanzados, consolidando un paso importante en el campo de la física médica ya que acarrean mayores posibilidades de éxito en los tratamientos oncológicos.
Actualmente, los especialistas mendocinos realizan pruebas sobre pacientes con cánceres de pulmón, cuello y cabeza y, según indicaron, este tipo de método podría estandarizarse en la provincia en un lapso de cinco a diez años.