Por Laura Cukierman. U-238#15 Enero 2015
México es un país rico en recursos de hidrocarburos y es un exportador neto de energía. Su interés por la energía nuclear surgió de la necesidad de encontrar una mayor independencia en estas fuentes de energía. Laguna Verde es la principal central nuclear de generación eléctrica con la que cuenta el país y que representa el 6,3% del consumo eléctrico nacional.
En 1956 el Estado mexicano creó la Comisión Nacional de Energía Nuclear (CNEN), dándole un impulso muy fuerte a la energía nuclear del país. Esta organización asumió la responsabilidad general de todas las actividades nucleares mexicanas, excepto el uso de radioisótopos y la generación de energía eléctrica. A la Comisión Federal de Electricidad (CFE), una de las dos compañías de electricidad de propiedad estatal, se le asignó el papel de generador nuclear en el futuro. Las investigaciones preliminares para identificar posibles sitios para plantas de energía nuclear se iniciaron en 1966 por la CNEN y la CFE y en 1969 por la CFE. El CNEN se transformó más tarde en el Instituto Nacional de Energía Nuclear (INEN), que a su vez se dividió en 1979 en el Instituto Nacional de Investigaciones Nucleares (ININ), Uranio Mexicano (Uramex) y la Comisión Nacional de Seguridad Nuclear y Salvaguardias (CNSNS). Todas estas instituciones están destinadas a promover el desarrollo de energía nuclear en México que, según su legislación, establece que el combustible nuclear es propiedad del Estado. Así el gobierno de México, a través de la Secretaría de Energía, es responsable del almacenamiento y de la eliminación de los combustibles nucleares y residuos radiactivos, independientemente de su origen.
De esta manera, en 1972 se tomó la decisión estratégica de construir la primera central nuclear para la generación de energía eléctrica y así, en 1976, se inició la construcción de Laguna Verde.
LAGUNA VERDE
Es la central nuclear más importante de México, ubicada sobre la costa del Golfo de México, en el municipio de Alto Lucero de Gutiérrez Barrios, en el Estado de Veracruz. Cuenta con una capacidad de 1,610 MW instalada en dos unidades generadoras de 810 MW eléctricos cada una. Fue elegido este sitio para su construcción a partir de cinco factores claves: la relativa cercanía a los centros de consumo, la disponibilidad de agua de enfriamiento, la estabilidad sísmica del lugar, un tipo de suelo preferentemente rocoso para la cimentación de la construcción y las buenas comunicaciones, terrestres y náuticas.
Los trabajos en la unidad 1 comenzaron en 1976, pero recién entró en operación en 1990. En el caso de la unidad 2, su construcción empezó en 1977 y se integró a la red de potencia eléctrica en 1995. En ambos momentos se contó con la certificación del organismo regulador nuclear de México, la Comisión Nacional de Seguridad Nuclear y Salvaguardas (CNSNS) y la Secretaría de Energía otorgó las licencias para entrar en operación comercial a ambas unidades. La central está administrada por la Comisión Federal de Electricidad a través de la Gerencia de Centrales Nucleoeléctricas. Además cuenta con la supervisión de organismos nacionales e internacionales encargados de controlar los mecanismos de seguridad necesarios para operar. Laguna Verde cuenta con 2 reactores de agua hirviente General Electric (BWR-5), que utilizan Uranio 235 enriquecido al 3% o 4%.
Cada unidad de la central cuenta con siete edificios principales:
Edificio Reactor: contiene en su interior al reactor nuclear, sus sistemas auxiliares y dispositivos de seguridad, una plataforma de recambio de combustible y la pileta de combustible gastado.
Edificio Turbogenerador: aloja a las turbinas de alta y baja presión, generador eléctrico, condensador, precalentadores de agua de alimentación y recalentadores de vapor.
Edificio de Control: contiene al cuarto de control principal, computadora de proceso, cuartos de cables, sistemas de aire acondicionado, bancos de baterías, laboratorios radioquímicos y acceso del personal a la unidad.
Edificio de Generadores Diesel: contiene tres generadores diesel que se usan para el suministro de energía eléctrica a los sistemas de refrigeración del reactor, en situación de emergencia.
Edificio de Tratamiento de Residuos Radiactivos: aloja a los sistemas de tratamiento de residuos sólidos, líquidos y gaseosos de mediano y bajo nivel de radioactividad.
Edificio de Planta de Tratamiento De Agua: contiene la planta de producción de agua desmineralizada de alta pureza, para uso en el ciclo de vapor.
Edificio del Sistema Integral de Información de Proceso: se localizan las computadoras del sistema integral de información de procesos, que proporciona en tiempo real los principales parámetros de planta.
Es tan importante esta central para México que los responsables de la Gerencia de Centrales Nucleoeléctricas afirman que “su construcción implicó una inversión económica muy importante, que permitió el crecimiento de poblaciones de tipo rural cercanas, al punto que algunas han alcanzado el título de ciudades cuando, antes de la construcción de la planta, eran considerados sólo poblados de paso rumbo a otras ciudades importantes por temas económicos o energéticos”.
También, supuso un importante desarrollo para la región en términos sociales, ya que se “extendieron planes de ayuda estatal para la población cercana a la central en materia de educación, salud y edificación social”, sostiene la CFE.
REGULACION Y SEGURIDAD
La Ley de 1984 sobre actividades nucleares estableció que el gobierno, a través de la Secretaría de Energía, es responsable del establecimiento del marco para el uso y desarrollo de la energía nuclear y la tecnología, de acuerdo con la política energética nacional. La Comisión Nacional de Seguridad Nuclear y Salvaguardias (CNSNS) es un organismo semiautónomo bajo la autoridad del Ministerio de Energía, que asume el papel de regulador. CNSNS es, entonces, la responsable de asegurar la correcta aplicación de las normas y garantías de seguridad nuclear y radiológica y protección física de materiales nucleares y las instalaciones radiológicas para garantizar la seguridad pública en todo México. También es responsable de revisar, evaluar y aprobar los criterios para la ubicación, diseño y operación de construcción de desmantelamiento de instalaciones nucleares y proponer las regulaciones pertinentes. Tiene el poder de modificar y/o suspender las licencias de instalaciones nucleares, que se conceden a través del Ministerio de Energía.
La Constitución mexicana establece que la energía nuclear sólo podrá ser utilizada para fines pacíficos y esto se reitera en la Ley de 1984 sobre las actividades nucleares. México ratificó el Tratado de No Proliferación Nuclear en 1969 y el Protocolo Adicional en 2004. También, es parte de la Convención de 1979 sobre la Protección Física de los Materiales Nucleares, ratificado en 1988. Además, México es el depositario del Tratado de 1967 para la Prohibición de las Armas Nucleares en América Latina (Tratado de Tlatelolco) y ha sido parte en el Tratado desde 1967.
CON LA MIRADA EN EL FUTURO
Según la Gerencia de Centrales Nucleoeléctricas de México: “A largo plazo, dentro de la Estrategia Nacional de Energía, se contempla la construcción de dos reactores más dentro de Laguna Verde, aumentando con ello el aporte al Sistema Eléctrico Nacional en hasta el 13%. De esta forma, se logrará reducir la dependencia de combustibles fósiles y establecer un mix energético mexicano con tecnologías cero emisiones”.