El acuerdo intergubernamental entre Rusia y Bolivia sobre la cooperación en el ámbito del uso de energía nuclear con fines pacíficos ya entró en vigor. Este acuerdo, que fue firmado el 6 de marzo en La Paz, crea una base jurídica para realizar en Bolivia proyectos de energía atómica con participación rusa.
Ambos países planean cooperar en crear y perfeccionar la infraestructura de la energía atómica boliviana, proyectar y crear reactores nucleares de investigación, suministrar combustible para estos equipos y trabajar con desechos radioactivos.
Rusia y Bolivia también van a colaborar en la producción de isótopos radioactivos para la industria, medicina y agricultura, preparación del personal para el sector atómico de Bolivia y la seguridad nuclear y radioactiva. Además, los países crearán un comité de coordinación para controlar el cumplimiento del acuerdo.
El primer proyecto conjunto será la construcción del centro de tecnologías e investigaciones nucleares en la ciudad boliviana de El Alto, que se realizará por la corporación rusa Rosatom. Bolivia aportará 300 millones de dólares para su construcción, que contará con un reactor de 200 kilovatios, un acelerador de partículas y varios laboratorios.