Atucha II encara la recta final

Por Sebastián de Toma.  En U-238 Marzo 2013

A pocos meses de la puesta en marcha del reactor de mayor potencia de la Argentina —prevista para mediados de año— se realizó el traslado y la carga de los 451 elementos combustibles en el reactor, los cuales fueron producidos íntegramente en el país. U-238 asistió al inicio de este proceso que duró 70 días y cuyas primeras cargas se realizaron de manera manual.

El 14 de diciembre pasado comenzó la carga de los elementos combustibles en el reactor de Atucha II, paso previo para la prueba de la central en caliente y su posterior puesta en marcha. Estuvieron presentes varias personalidades del sector, como el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido; el secretario de Energía, Daniel Cameron; el subsecretario de Coordinación y Gestión, Roberto Baratta; el vicepresidente de Nucleoeléctrica Argentina S.A. (NA S.A.), José Luis Atúnez; y la presidenta de la CNEA, Norma Boero.

El proceso demoró unos 70 días e implicó la carga de 451 elementos combustibles que contienen 85 toneladas de uranio en total. Estos elementos han sido producidos íntegramente en el país y están compuestos, cada uno, por 37 barras de zircaloy1, que a su vez contienen pastillas de uranio natural. Las primeras cargas se realizaron de manera manual para acelerar el proceso, pero luego el túnel del reactor fue sellado y la operación pasó a ser automática. La columna térmica en la que se coloca cada elemento combustible está formada por la parte neutrónicamente activa de 5,30 metros de longitud y un cuerpo de relleno de acero inoxidable que mide 4,16 metros y pesa 255 kilos. A esto se le suma un cuerpo de cierre de 0,50 metros y 30 kilos aproximadamente. Por lo cual cada elemento combustible pesa 539 kilos y tiene una longitud de 9,76 metros.

Luego de finalizar la carga del combustible, se realizará una prueba de la central en caliente con vapor de origen no nuclear, entre febrero y abril de este año, que incluirá la sincronización con la red nacional. Por último, se retirará el total del agua liviana del sistema2, se procederá a su secado y se llenará con 600 toneladas de agua pesada producida en la Planta de Arroyito, Provincia del Neuquén, por ENSI (Empresa Neuquina de Servicios de Ingenieria, Sociedad del Estado).

Si todo marcha según lo previsto, Atucha II va a estar funcionando a fines del primer semestre de 2013 y proveerá un aproximado de 700 megavatios al Sistema Interconectado Nacional, el doble de lo generado por Atucha I (357 megavatios) y un poco más de lo que genera Embalse (648 megavatios). Con las tres centrales funcionando, el sector nuclear proveerá el 10% de la energía total consumida en el país. Sin embargo, esto recién ocurrirá entre fines de 2014 y mediados de 2015 dado que, cuando Atucha II sea puesta en marcha, Embalse va a salir de funcionamiento para ser reacondicionada, extendiendo así su vida útil. Este proceso va a tomar entre 18 y 24 meses.

El diseño del reactor de Atucha II fue realizado por la empresa alemana Kraftwerk Union (KWU), manejada por Siemens, pero cuando el Estado decidió recomenzar la construcción de la central esta empresa se estaba retirando de la industria nuclear, por lo que la estatal Nucleoeléctrica Argentina S.A. fue la encargada de la finalización de la obra. Según informó el ministro De Vido en una conferencia de prensa, ya se invirtieron en la central 13.000 millones de pesos y todavía faltan invertir 1.300 millones más.

La construcción de la central comenzó en 1981 y debía estar terminada para 1987, pero esos plazos se fueron alargando hasta el golpe de gracia, cuando el por entonces presidente Menem redujo de manera drástica el presupuesto de la CNEA. La obra civil se detuvo en 1994 y de las 3 mil personas empleadas quedaron 150. El personal que quedó se ocupó de preservar las 85 piezas del reactor en perfecto estado. Con la reactivación en 2006 del Plan Nuclear Argentino3, se puso en marcha primero la finalización de los edificios y las obras electromecánicas, para finalmente pasar al ensamblado del reactor. En este último periodo llegaron a emplear 7 mil personas y actualmente trabajan nuevamente alrededor de 3 mil. Cuando esté en operaciones, la dotación de la planta será de 1.300 personas.

Para terminar la construcción de Atucha II se utilizaron 4 mil toneladas de tubos, 16 mil válvulas, 700 mil soldaduras, 3 mil kilómetros de cables, 1 millón de puntos de conexión, 12 mil instrumentos, 1.600 tableros y 32 mil metros cúbicos de hormigón. Además se utilizaron 42 millones de horas/hombre, 15.200 contratos y órdenes de compra, 126 mil documentos de ingeniería; se sirvieron 5 millones de comidas y se transportaron más de 2 millones de trabajadores.

Además de terminar Atucha II y extender la vida de Embalse, el Plan Nuclear Argentino contempla construir Atucha III y la fabricación del Carem 25, el primer reactor de potencia realizado con tecnología nacional que servirá como laboratorio de investigación y de entrenamiento para operadores de grandes centrales. Esto último es fundamental porque, a causa del recorte neoliberal de los 90, se perdió una generación de investigadores, trabajadores y técnicos: los que hoy están poniendo a punto la nueva planta son los que trabajaban en ella hace veinte años, por lo que el promedio de edad supera los cincuenta años. De Vido adelantó que la cuarta central también será construida en el predio de la CNEA en Zárate y que los pliegos para proceder con la licitación para la construcción de la vasija del Carem, el recipiente que contendrá al núcleo de ese reactor, ya están listos.

 

1 El zircaloy lo produce la Fábrica de Aleaciones Especiales, FAE S.A., creada en 1986 y ubicada a minutos del Aeropuerto Internacional de Ezeiza.

2 La carga de agua desmineralizada para la prueba de presión de los sistemas del circuito primario del reactor y del moderador se inició en octubre de 2012 y consistió en presurizar las tuberías y, por medio de las bombas principales, hacer circular 500.000 litros de agua para probar su hermeticidad.

3 En la actualidad se están construyendo unas 64 centrales nucleares en todo el mundo, según nos comentó Gustavo Jiménez, un técnico de NA-SA que nos acompañó durante el trayecto hasta Lima, en el partido de Zárate, en la vera del río Paraná, donde se encuentra el predio de las Atucha. Habrá nuevas centrales en China, Arabia, India, unas 13 en toda la Eurozona, y además se reactivaron proyectos en la costa oeste de Estados Unidos y en Brasil (Angra III).