Según el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), el análisis de los isótopos del carbono, el nitrógeno, el fósforo y otros elementos, permite calcular la cantidad exacta de fertilizante que las plantas necesitan en determinado entorno.
La entidad aseguró que «mediante el análisis de los isótopos del carbono, el nitrógeno, el fósforo y otros elementos, los científicos pueden calcular la cantidad exacta de fertilizante que las plantas necesitan en determinado entorno».
«Cuando se usa demasiado fertilizante el cultivo tiene menor rendimiento y genera más emisiones de gases de efecto invernadero. Estos expertos pueden redactar orientaciones para los agricultores sobre la composición, la dosis y la frecuencia de uso de los fertilizantes. Gracias a este tipo de estudios, se ha mejorado la producción agrícola y se ha contribuido a la lucha contra el hambre y la malnutrición en todo el mundo, en particular en regiones en donde hay escasez de alimentos», explicó la entidad.
«Tanto nuestra salud como la del planeta dependen de las plantas: estas nos proporcionan el 80 % de los alimentos que ingerimos y el 98 % del oxígeno que respiramos. Aun así, no se las protege lo suficiente y por ello enfrentamos problemas de gran magnitud, como la degradación de los suelos», afirmó el organismo.
Por otro lado, destacó que «las técnicas nucleares nos ayudan a observar los procesos en los suelos para protegerlos y mejorar la producción agrícola, la seguridad alimentaria y el bienestar de los seres humanos en todos los lugares del mundo”.
En ese sentido, indicó que «mediante técnicas nucleares o isotópicas, pueden reunir información cuantitativa fiable sobre la salud y la calidad del suelo, que es de gran utilidad a la hora de formular políticas adecuadas de ordenación y preservación de tierras agrícolas y de adaptación a los efectos del cambio climático.
Najat Mokhtar, Directora General Adjunta y Jefa del Departamento de Ciencias y Aplicaciones Nucleares del OIEA, señaló que “los animales, las plantas y los humanos necesitamos alimentos nutritivos en cantidades suficientes para poder gozar de buena salud», pero «en los últimos 70 años se ha reducido considerablemente la concentración de vitaminas y nutrientes en las frutas, verduras y cereales debido a la pérdida de fertilidad del suelo”.
El Centro Conjunto FAO/OIEA promueve el uso de las tecnologías nucleares y de base nuclear en la alimentación y la agricultura. Desde hace más de 60 años asisten a los países en la aplicación de técnicas nucleares, isotópicas y de base nuclear en la agricultura. Cabe señalar que el Centro Conjunto FAO/OIEA ayudó a los agricultores de la República Democrática Popular Laos a aumentar el rendimiento del arroz en un 60 % mediante la aplicación de mejores prácticas de gestión del suelo y los nutrientes. También colaboró con expertos en Costa Rica para reducir la cantidad de gases de efecto invernadero que se producen como consecuencia del uso de fertilizantes en la agricultura, de esa manera contribuyó al rendimiento de los cultivos de arroz.
