La central nuclear de Vandellós II (España) fue desconectada de la red eléctrica para iniciar la 20ª recarga de combustible y los trabajos de mantenimiento previstos, que darán paso a un nuevo ciclo de operación de 18 meses.
La Asociación Nuclear Ascó-Vandellós II (ANAV) informó que se realizarán “más de 8.500 órdenes de trabajo, la mayoría de las cuales corresponden a trabajos de mantenimiento preventivo e inspecciones”. La realización de estas tareas, precisó ANAV, “requiere de una planificación previa muy detallada y con la coordinación de todas las unidades organizativas implicadas”.
Además de la sustitución de 64 de los 157 elementos combustibles alojados en el reactor, los trabajos más relevantes son la sustitución de la tapa de la vasija del reactor, una modificación de diseño preventiva para dotar a la planta de mayor capacidad para operar de manera segura, fiable y a largo plazo.
Además, se continuarán implantando las modificaciones de diseño relacionadas con el proyecto Refuerzo de la Seguridad derivado de las pruebas de resistencia. «Con ello la planta sigue incrementando su robustez y capacidad de respuesta ante sucesos que pudiesen ir más allá de las bases de diseño de la central”, explicó ANAV.
Durante la 20ª recarga de combustible –cuyo presupuesto asciende aproximadamente a 20 millones de euros- Vandellós II duplicará la plantilla que habitualmente trabaja en la central. Alrededor de 1.000 profesionales de unas 40 empresas colaboradoras se sumarán a los trabajos de recarga.
