De acuerdo con el sitio NucNet, dos unidades de la central nuclear de Ohi, en Japón, continuarán su operación comercial hasta septiembre de 2013, de acuerdo con las nuevas normas regulatorias que fueron aprobadas a principios de este mes por la autoridad japonesa de regulación nuclear (NRA).
La NRA aceptó “en gran parte” una evaluación escrita por un grupo de expertos que concluyó que no se causarían «problemas graves de seguridad» en el corto plazo en las unidades 3 y 4 de la central de Ohi, la cual es operada por la empresa Kansai Electric Power Company (Kepco).
Las nuevas normas sobre seguridad nuclear fueron elaboradas como consecuencia del accidente en la central Fukushima-Daiichi en marzo de 2011, y estas apuntan a tres áreas principales: normas de seguridad en la etapa de diseño, medidas para mitigar accidentes graves y normas de seguridad para terremotos y tsunamis.
Tras el accidente de Fukushima-Daiichi, todos los reactores japoneses fueron cerrados para realizar controles de seguridad. Actualmente, solo las unidades Ohi 3 y 4, ambos reactores de agua a presión, se encuentran en operación comercial.