En las últimas semanas, se han otorgado importantes contratos para la construcción del International Thermonuclear Experimental Reactor (ITER), el gran centro de investigación de fusión nuclear por confinamiento magnético, que se está edificando en Cadarache, al sur de Francia.
Se estima que los primeros equipos llegarán al emplazamiento a partir de 2014, mientras que el reactor Tokamak lo hará en 2015. La construcción se completará en 2019 y las operaciones comenzarán un año más tarde.
El mayor contrato de construcción -por un importe de 230 millones de euros- ha sido otorgado a un consorcio franco-español, que se encargará del diseño y construcción de once edificios y zonas de almacenamiento, incluyendo el complejo del Tokamak y la nave de montaje de los equipos.
Otro de los contratos ha sido adjudicado a Equipos Nucleares (ENSA), por valor de 74,5 millones de euros, para la ejecución de todos los trabajos de ensamblado de la cámara de vacío. La tarea se ejecutará en Cadarache durante cuatro años, tras una fase de desarrollo de técnicas especiales de soldadura, preparación de utillajes y herramientas, que durará más de tres años.
El ITER es considerado el mayor proyecto científico de investigación energética del mundo. Fue ideado en 1986 para demostrar la factibilidad científica y tecnológica de la fusión nuclear. Actualmente, participan del proyecto siete socios: la Unión Europea, India, Japón, Rusia, Estados Unidos, Corea del Sur y China.