El pasado jueves 18 de julio, se realizó en la central nuclear José Cabrera -ubicada en la provincia de Guadalajara, España- el preceptivo simulacro anual, conforme a los requerimientos establecidos en su Plan de Emergencia Interior.
Durante todo el simulacro intervino la Organización de Respuesta ante Emergencias del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), tanto desde la Sala de Emergencias (SALEM) como desde el Centro de Coordinación Operativa (CECOP) de Guadalajara. Esta institución se encargó del seguimiento de la instalación y de las actuaciones del titular e interaccionando con las autoridades de Protección Civil para la recuperación de las condiciones de seguridad y para la adopción de medidas de protección radiológica.
Desde el CSN informaron que “el ejercicio se inició con la declaración, a las 10.16, por parte de la planta, de situación de Prealerta de Emergencia en el emplazamiento por vientos superiores a 90km/h. Posteriormente, se ha simulado la elevación de la categoría a Alerta de Emergencia, a consecuencia la caída de una valla en el Almacén Temporal Individualizado, con el consecuente riesgo de daño a los contenedores”.
Además, se simuló un incendio en la Sala de Cables de Sala de Control. Si bien esta es una zona considerada como convencional, que no tiene implicaciones radiológicas, a causa del incendio, un trabajador se habría intoxicado por inhalación de humo. En el marco del simulacro, los servicios médicos de la central habrían comprobado que el herido no había sufrido contaminación radiológica, pero de todos modos decidieron trasladarlo al hospital de Guadalajara.
Al finalizar el ejercicio, la planta se encontraba en condiciones seguras y el Plan de Emergencia Nuclear Exterior se mantuvo en todo momento en situación 0. Según el CSN, una situación de esta naturaleza habría sido clasificada como incidente de nivel 0 en la Escala Internacional de Sucesos Nucleares (INES).